La tecnología y su impacto en nuestras vidas ha traído consigo una inmensidad de términos: Big Data, Machine Learning, e Industria 4.0. Sin embargo, el que ostenta la corona de ser el más utilizado al interior de las empresas es “transformación digital”. 

Alrededor de este concepto giran en torno discusiones enteras e inquietudes sin punto final. Entre las más comunes, podríamos encontrar: ¿La transformación digital es un producto? ¿Cómo me podría ayudar un CRM o ERP? ¿Es posible integrar todos mis sistemas internos? ¿Es muy costoso? ¿Y si no funciona?

Para responder a todas estas incógnitas, analizamos los 10 principales mitos relacionados a la transformación digital. Conociendo su verdad, podrás eliminar las barreras o miedos que te impiden saltar al vacío del éxito implementado proyectos digitales que agreguen valor a tu empresa.

Mito #1: La transformación digital es una moda

Aunque muchas empresas han sobrevivido por años con tradicionales métodos de trabajo y producción, todo nos parece indicar que la obsolescencia tecnológica podría amenazar su sostenibilidad para los próximos cinco años.

Hoy, más que nunca, la coyuntura desatada por la actual pandemia nos demuestra la necesidad de revisar detalladamente anticuados modelos de negocio y adaptarlos a las nuevas necesidades de los usuarios.

Solo en América Latina, el comercio electrónico creció 300% durante el último año. Lo cual indica que cada vez son más las personas que confían sus compras a un canal de venta digital y aplicaciones web.

Mito #2: En épocas de crisis se debe frenar toda inversión en tecnología

El COVID-19 solo fue un acelerador de una tendencia que ya se venía consolidando. De hecho, en una época de recesión económica y aislamiento obligatorio, la tecnología ha demostrado estar en el lado correcto. Es clave entender que las nuevas maneras de consumir que se han venido afianzando continuarán en el futuro.

Reunirnos en videoconferencias, comprar en comercio electrónico, o disfrutar de contenido bajo demanda son situaciones que no van a tener grandes cambios una vez se flexibilicen las medidas sanitarias.

Este escenario de cambio, le implica a las empresas incluir en sus planes estratégicos toda una serie de accionables relacionadas a ciberseguridad, inteligencia artificial e internet de las cosas (IoT, por sus siglas en ingles).

Mito #3: Es costoso crear una plataforma digital u optimizar cualquier proceso

En la actualidad, existen diferentes maneras de escalar un proyecto en el tiempo. Un producto mínimo viable (MVP, por sus siglas en inglés) ha sido el punto de partida de grandes productos de tecnología que actualmente utilizan millones de usuarios. De hecho, la construcción de tecnología confiable se caracteriza por contar con el respaldo de una metodología iterativa.

A su vez, automatizar procesos transversales permite eliminar tareas repetitivas, o cualquier cuello de botella. En ese sentido, optimiza costos en trámites operativos. El ahorro que podría generarte una solución a la medida en el largo plazo, no tiene precio.

Mito #4: La transformación digital es imposible de definir

Pese a las miles de definiciones o tautologías que giran en torno al concepto transformación digital, debemos entenderla como una vía a partir de la cual las empresas se sobreponen a grandes retos creados por la convergencia de los mundos físico, digital y humano. Dicho de otro modo, es una estrategia diseñada para resolver problemas de negocio y acceder a nuevas oportunidades a través del uso de la tecnología.

Para implementarla, es indispensable tener claro nuestro objetivo de negocio y definir la manera cómo vamos a generar valor a nuestros clientes. De hecho, las herramientas y el tipo de plataforma digital a utilizar son lo último que se definen.

Mito #5: La tecnología es lo más importante en un proceso de transformación digital

Es innegable que la tecnología es indispensable para sobrellevar un proceso de este tipo. Sin embargo, tan importante como ella, es el cambio cultural y de mentalidad que se llega a dar al interior de las organizaciones.

Focalizarse únicamente en lo digital o técnico, no te garantiza el éxito de la iniciativa. Aquí es fundamental reconocer que las personas, la cultura y la estructura organizacional son los elementos que en realidad marcan la diferencia.

Mito #6: La transformación digital es un proceso extenso que toma años

La crisis sanitaria que enfrenta la humanidad, demostró que ejecutar proyectos digitales e iniciativas de corto plazo, orientadas al resultado y medibles nos permiten obtener una visión acertada sobre el ROI. Todo esto, aumenta las posibilidades de obtener ganancias a corto y mediano plazo.

Bien implementada, y en un periodo de tiempo no muy extenso, debería impactar tus métricas reales: ingresos, costos, interacción con clientes, retención o LTV.

Aunque es un proceso que se puede ejecutar a diferentes velocidades, es clave que durante su implementación tu liderazgo adquiera un estilo renovado que supere el jerárquico tradicional. El nuevo estilo se destaca por facilitar, preguntar, empoderar, retar, generar una visión compartida en equipos multi-generacionales y cada vez más diversos.

Mito #7: La transformación digital depende de una sola inversión en dispositivos electrónicos

Como has visto hasta aquí, todo proceso de digitalización implica mucho más que utilizar tecnología. Es indispensable que al interior revisemos nuestras verdaderas necesidades y cómo estas podrían solucionarse en el proceso de implementación.

La tecnología agrega valor cuando existe una razón de peso y un propósito proyectado en el largo plazo.

Mito #8: La transformación digital es solo para startups o empresas con servicios al cliente final (B2C)

La digitalización es imparable. Afecta a todas las empresas y sectores por igual. Ha llegado como una una revolución que hace tambalear los ranking históricos de marcas valiosas que parecían inamovibles.

Ante este escenario de cambio, todo parece indicar que en el futuro cercano no sobrevivirán las empresas más grandes ni rápidas, sino las que mejor se adapten a los nuevos procesos.

Mito #9: El trabajo remoto amenaza la productividad de las empresas

Una oficina no es indispensable para cumplir con diferentes responsabilidades. Las nuevas tendencias de productividad laboral, nos indican que todo equipo debe adoptar una cultura de compromiso y mantener conversaciones transparentes para mantenerse competitivo.

Las metodologías de trabajo ágil, nos ha enseñado que la flexibilidad y autonomía son indispensables para cumplir con precisión cualquier plan de trabajo. Conceptos como trabajador virtual, teletrabajo o colaborador remoto darán mucho de qué hablar en los próximos años.

Mito #10: La transformación digital es responsabilidad del CTO

Solemos creer que el encargado de ejecutar el proceso es el responsable del área de tecnología. Aunque su opinión y supervisión es determinante, no podemos olvidar que la digitalización es un proceso transversal. Abarca cada uno de los departamentos de una empresa.

De hecho, su impacto se percibe en diferentes áreas de la compañía. Mientras mejora la experiencia del cliente, de acuerdo a la consultora Mckinsey, logra aumentar en 20% la facturación y reducir un 36% los costes.

En resumen

El término transformación digital ha sido uno de los más utilizados en los últimos años. Sin embargo, debido a la multiplicidad de definiciones e incorrectos usos, muchos empresarios y directivos desconocen cómo aplicarla o, en casos más extremos, siquiera de qué trata.

Como lo podríamos deducir, los ganadores de la transformación digital serán aquellas empresas que mejor se adapten. En este proceso, no importa el tamaño y ni mucho menos el sector del negocio.

Aquellas barreras de entrada que antes eran tan comunes, se comienzan a difuminar abriendo una batalla competitiva más amplia donde día a día se suman nuevas alternativas. Muchas de estas, con mayores recursos o más agilidad en la toma de decisiones.

Esta situación, le implica a las empresas consolidadas a anticiparse y reconocer que el éxito pasado no necesariamente garantiza el futuro. El nuevo mercado demanda líderes con una visión amplia y sin miedo al cambio. La transformación digital, aún con sus mitos, mentiras y verdades, está pasando ahora.