La metamorfosis de las formas de pago del futuro
Johan Bernal
Marketing SpecialistEl sector financiero se encuentra inmerso en una transformación que ha sido acelerada por la pandemia. En este proceso, los pagos electrónicos han sido fundamentales gracias a su papel en la vida financiera de una gran parte de la población mundial.
Esta metamorfosis por la que atraviesan hoy los métodos de pago lleva consigo dos tendencias en paralelo: una evolución del front y del back-end de los sistemas de pago (pagos instantáneos, pagos de facturas y solicitudes de pago, tarjetas plásticas y carteras digitales); así como una revolución en el ecosistema de pagos (facilidades de pago a crédito; criptomonedas; y futuras monedas digitales de los Bancos Centrales).
El aumento de los pagos electrónicos ubicó a la inclusión financiera como una de las prioridades del sector, debido a que ambos aspectos cumplen un papel crucial en la innovación del desarrollo digital a nivel mundial.
El informe Payments 2025 & beyond de la firma PWC ha identificado las tendencias que tendrán que tener en cuenta los distintos actores de la industria para afrontar el futuro. Además, prevé que en 2030, los pagos electrónicos prácticamente se tripliquen en el mundo, superando los tres billones de operaciones.
Según sus estimaciones, entre 2020 y 2025 las transacciones electrónicas crecerán un 82%, pasando de un billón a 1,8 billones. Y entre 2025 y 2030, su crecimiento será del 61%.
Distribuyendo su crecimiento por áreas geográficas, Asia-Pacífico será la región que liderará el crecimiento, con incrementos del 109%, hasta 2025, y del 76%, entre 2025 y 2030, seguida de África (78%/64%) y de Europa (64%/39%). Estados Unidos y Canadá será la región donde el aumento será más moderado (43%/35%).
Y no solo los métodos de pago se optimizarán, ya que la bancarización regional sigue en alza. Por ejemplo Colombia, que pasó de tener un 51% de adultos con servicios financieros en 2006, a más del 87 % en 2020, según Forbes.
Mientras este auge digital continúa en proceso, te mostramos cuáles son las tendencias que tienen y tendrán los consumidores en temas de métodos de pago alternativos:
¡La inclusión tiene forma de QR!
Aunque ya existían antes de la pandemia, el interés de los consumidores por los códigos QR se ha incrementado. Un ejemplo claro de los lugares donde se destacan son los restaurantes que han convertido a estos códigos en la mejor alternativa para presentar su menú, sin que este deba pasar de mano en mano en su forma física. En un contexto donde disminuye cada vez más la preferencia por pagar con efectivo y crecen las billeteras virtuales, los usuarios hoy perciben a los pagos con QR como cómodos, seguros y rápidos.
Esta noción positiva se debe a las ventajas que ofrece el QR a consumidores y comerciantes. Para los clientes representa una simplificación del proceso de compra, ya que simplemente deben escanear el código, seleccionar su banco y pagar con un clic a través de su app de banco móvil. Y, para los comerciantes, los pagos con código QR tienen menores costes de infraestructura frente a otros medios de pagos sin contacto, al no requerir terminales ni procesos in situ.
¿Cómo será la consolidación del QR?
Según un reciente estudio del Centro de Análisis FUNCAS, cerca de 1.500 millones de personas en todo el mundo utilizaron códigos QR para pagar en 2020 y la familiarización de muchos usuarios con estos, hace que expertos piensen que se incrementará su uso en el futuro tanto en las economías emergentes como en las más desarrolladas. Según FUNCAS, en el 2025, se estima que el 30% de los usuarios de dispositivos móviles utilizarán códigos QR para pagar.
¿Pueden ser usados por todos los usuarios?
Para ver una verdadera democratización del uso de los QR será necesario que su implementación se extienda a más comercios a través de infraestructuras sólidas. Algunos estudios realizados en Europa muestran que el pago con QR se da en actividades de consumo muy específicas, especialmente en bares, cafeterías y restaurantes, por lo que su expansión no será tan difícil en pymes.
Las Tarjetas Prepago 2.0:
Estas son uno de los productos financieros más accesibles que han existido, pues la entidad encargada de crearlas no tendrá que hacer un estudio de solvencia del cliente para poder asignarlas.
Este tipo de tarjetas se caracterizan porque cuentan con un saldo virtual que no necesita respaldarse con una cuenta bancaria asociada, lo cual es lo que la diferencia primordialmente de una tarjeta débito. Y también porque nunca podrá gastar más de su saldo disponible, que es lo que la diferencia de una tarjeta de crédito.
¿Cómo se pueden recargar?
Este tipo de tarjetas se recarga mediante transferencia bancaria a través de una plataforma blockchain o por el método indicado según cada entidad. Generalmente los bancos suelen tener disponible una página web o una app propia a través de la cual se puede consultar el saldo de la tarjeta, las operaciones realizadas, etc. Además, disponen de una numeración única y un PIN. Dependiendo de la entidad que otorgue la tarjeta, podrá ser gratuita o estar sujeta a comisiones de emisión y manejo.
¡Así va su implementación en Latinoamérica!
La tendencia de las tarjetas prepago está creciendo en diversos países de la región, debido a que surgieron como una alternativa para aquellos usuarios que no tienen el poder adquisitivo o el respaldo de un banco para recibir créditos.
Sin embargo, en nuestra región podrían aprovecharse las grandes ventajas que este medio de pago ofrece, como el hecho de que son un instrumento clave para la inclusión financiera, la reactivación económica y la competencia a los bancos tradicionales.
Mientras tanto, su aceptación aún es resistida a nivel general, e incluso grandes cadenas de supermercados que han coincidido en no aceptarlas por años, recién comienzan a aceptar su uso pero restringido al pago presencial y no para e-commerce.
¿Cuál podría ser la razón para tal resistencia de parte de las empresas?
Esta resistencia podría deberse a un tema de costo, aunque la tarifa que enfrentan al recibir una tarjeta de prepago es igual a la de recibir una débito y menor que recibir una de crédito. Sin embargo, estas tarjetas servirán para ofrecer mejores condiciones para los que no tienen un gran poder adquisitivo.
De todas maneras, la conclusión verdaderamente relevante es que expertos mencionan que la tendencia cambiará y la solución se democratizará.
En Resumen:
Cada vez se realizan más pagos electrónicos en busca de una inclusión financiera global. Algunos informes mencionan que para 2030 se triplicarán en el mundo, superando los 3 billones de operaciones. Mientras este auge digital continúa en proceso, las tendencias en métodos de pago alternativos que se consolidarán entre los consumidores serán los códigos QR y las tarjetas prepago.
Aunque ambas soluciones ya existían antes de la pandemia, el interés de los consumidores por los códigos QR se ha incrementado debido al crecimiento de las billeteras virtuales y ya que los usuarios hoy perciben a los pagos con QR como cómodos, seguros y rápidos.
Entre las ventajas que ofrece el QR a consumidores y comerciantes encontramos que, para los clientes hace más sencillo el proceso de pago, y para los comerciantes, los pagos por este medio tienen menores costes de infraestructura frente a otros medios de pagos sin contacto.
Según estudios, cerca de 1.500 millones de personas en todo el mundo utilizaron códigos QR para pagar en 2020. Por su parte, las tarjetas prepago son uno de los productos financieros más accesibles que han existido, y su uso está creciendo en la región, debido a que resurgieron como una alternativa para aquellos usuarios que no tienen un gran poder adquisitivo.
Entre las ventajas que este medio de pago ofrece, se destaca que son claves para la inclusión financiera, la reactivación económica y la competencia a los bancos tradicionales. Aunque su aceptación aún es resistida a nivel general, la tendencia cambiará y podría llegar a convertirse en una solución democratizada.
Written by Johan Bernal
Johan is a creative professional skilled in developing and executing effective marketing strategies. Their expertise in market analysis and campaign management drives brand awareness and customer engagement.